La botella con el suero está hecha de plástico mate que imita el vidrio y tiene un aspecto decente. El producto se aplica mediante pulverizador con una nube fina y dispersa, de distribución bastante amplia. Organolépticamente el producto es bifásico: líquido con inclusiones visibles de textura oleosa. Antes de aplicar el suero, se debe agitar el frasco, tras lo cual la textura del producto adquirirá un color uniforme, ligeramente amarillento. El producto tiene olor, no está perfumado, pero para mí es agradable, natural (quizás las trufas huelen así, pero esto no es seguro. Mirando atentamente la composición, se puede notar fácilmente una cantidad bastante grande de aceites en el composición. También consideré mi urea favorita en el primer tercio de los ingredientes y su niacinamida no muy favorita, pero sí muy popular, aproximadamente en la misma parte. La composición no causó ninguna reacción cutánea negativa (incluidas las alérgicas). El suero no forma una película en la cara, se absorbe fácilmente y se rocía bien; no se rocía con un "chorro dirigido", sino que sale como una nube. Por lo tanto, 2-3 pulverizaciones son suficientes para aplicar en la cara y el cuello.
